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¿Tienes que hacer una mudanza de tu empresa? Si ya de por sí es difícil mudarse de casa, imagina hacerlo de empresa. Es bueno, porque en la mayoría de los casos, cuando cambia el domicilio de una empresa es para bien, pero el trasladar personas y documentos en tiempo récord puede convertirse en una odisea de la que no querrías volverte a ver metido.
Las mudanzas de empresas
Para hacer una mudanza de empresas lo mejor y más recomendable, si no quieres volverte loco, es utilizar una empresa de mudanzas que es capaz de hacértelo en un día y con la que vas a confiar en que todo esté en ese lugar en el mínimo tiempo posible.
Eso sí, has de revisar bastante bien qué tipo de empresa de mudanzas eliges porque no todas son profesionales y, para evitarte sustos, mejor es que valores con tiempo.
Otra de las claves importantes es la organización. Ni se te ocurra dejarlo para el último día todo porque te dará algo. Así que intenta organizar todo bien y, sobre todo, no coger mucho trabajo en la fecha en que vas a hacer la mudanza, más que nada para que no tengas problema de no poder cumplir con el encargo.
Cuidado con las mudanzas porque, en ocasiones, puede ocurrir que se pierdan clientes. ¿Lo mejor? Dejar dicho a los vecinos de otros locales que te has trasladado, dejarle tarjetas de visita y pedirles la ayuda de que, si alguien va preguntando por la empresa, le digan que os habéis cambiado. Esto parece una tontería pero es uno de los errores que se cometen y luego es posible que ese cliente te haga falta.
Revisa el local que dejas al dedillo. Más de una vez ha pasado que, al final, se ha quedado algo allí que era de suma importancia (por ejemplo documentos que había que conservar y que han acabado en la basura, con nombres y todo). Así que no escatimes en mirar una, dos y tres veces. Incluso más.
Recuerda que las mudanzas de empresa son muy importantes y, si confías en profesionales, tendrás un trabajo experto.
