Hemos hablado en multitud de ocasiones sobre los objetos de valor en una mudanza pero generalmente pensamos en joyas u otro tipo de bienes materiales de gran valor económico. Sin embargo, nos hemos encontrado ya con muchos casos donde estos bienes de valor incalculable o sentimental han resultado ser libros y es que si eres un gran aficionado a la literatura, estamos convencidos de que tu extensa biblioteca es un auténtico tesoro para ti.
Una mudanza es un buen momento para llevar a cabo un repaso de toda nuestra colección de libros, incluso aunque duela, deshacernos de muchos de ellos que ya no resultan útiles. Vamos a explicar los dos pasos que recomendamos en una mudanza cuando se cuenta con una gran biblioteca en casa.
Paso 1: Selección
Por supuesto que si eres un amante de los libros tendrás una gran colección y deshacerte de ellos no es una opción válida por mucho que los hayas leído varias veces. Lógicamente, no nos referimos a estos ejemplares, pero seguro que tienes adornando una de las estanterías de casa una enciclopedia, un atlas o libros académicos que se han quedado totalmente desfasados o anticuados. Es lógico no querer deshacerse de esa novela que te enamoró cuando la leíste, pero tal vez es el momento de tirar esa vieja enciclopedia que ya no sirve y que sólo acumula polvo y ocupa espacio.
Paso 2: Embalaje
Los libros, porque pequeños que sean, cuando su número es considerable son un peso importante dentro de una caja. Por suerte existen multitud de tamaños y cajas reforzadas para transportarlos pero aún así, es recomendable que las cajas nunca superen los 20 kg de peso. Ten en cuenta este dato a la hora de llenar tus cajas de libros, incluso si pesan menos mejor. Si te sobra espacio puedes aprovecharlo para guardar otros objetivos livianos o incluso objetivos como mantas o sábanas que no pesan y te ayudarán a proteger los libros.