Un guardamuebles ofrece la posibilidad de guardar todo aquello que no tenga cabida en tu domicilio y que no quieres tirar a la basura. Se trata de una solución temporal que permite disponer de un espacio donde almacenar cosas que pueden tener utilidad en el futuro.
En Grupo Cariño disponemos de un servicio de guardamuebles en Granada adaptable a las necesidades del cliente. Contamos con contenedores de distintos tamaños para que el cliente encuentre justo el espacio que necesite, una gran ventaja frente a otras alternativas como los almacenes, donde el precio es el mismo sea cual sea el espacio a utilizar.
Pero la cuestión de la que queremos hablar en el artículo de hoy tiene que ver con los objetos que se almacenan en el guardamuebles, pues con algunos de ellos conviene tomar algunas precauciones. Estos son algunos ejemplos:
- Objetos que contengan algún líquido. Los objetos que contengan en su interior algún tipo de líquido no es una buena idea almacenarlos. Se corre el riesgo de que el objeto se caiga, se rompa y derrame el líquido, lo cual puede provocar desperfectos en el resto de objetos del guardamuebles.
- Ropa. La ropa es uno de los objetos que más se suelen almacenar en los guardamuebles. Sin embargo, si la ropa va a estar almacenada durante un largo periodo de tiempo conviene utilizar antipolillas para que se pueda conservar en buen estado. No obstante, en Grupo Cariño fumigamos nuestras instalaciones de forma periódica para evitar la aparición de éstos y otros insectos.
- Objetos más sensibles. Aquellos objetos frágiles o que sean más sensibles de sufrir algún deterioro conviene embalarlos con un material especial. Dependiendo del objeto convendrá un embalaje antiimpactos o un embalaje que evite el deterioro por el paso del tiempo.
- Aparatos electrónicos. Los objetos electrónicos tienen una alta probabilidad de sufrir algún deterioro en sus componentes con el paso del tiempo, sobre todo si llevan pilas.